Después del excelente resultado de la semana pasada contra Gernika, suele ser normal jugar un partido mucho más trabado la semana siguiente. El rival no nos dejó hacer un buen partido en la ida, nos supo frenar muy bien el ritmo y nos puso en algunos apuros, por lo que no íbamos con buenas sensaciones al partido del sábado. El campo, el rival, la hora… poca broma.
Así lo entendió también el mister, que supo inculcar una gran mentalidad defensiva al equipo. Poco tardaron las nuestras en demostrarnos que han cogido velocidad de crucero, que todos nuestros temores eran totalmente infundados. Serias y muy agresivas saltaron las azulonas a la cancha y con un gran acierto ofensivo y un ritmo de partido muy elevado, poco a poco fuimos anotando puntos con mucha rapidez, haciendo inútiles los intentos de las de la Margen Izquierda de igualar el partido, pese a que lo intentaron de todas las formas posibles. Pero cuando las nuestras salen con esa actitud, el rival tiene problemas para parar el vendaval azulón.
Altísimo ritmo y rápidas transiciones unidas a un gran acierto exterior, dio como resultado un 7-18 en el primer cuarto, 17-23 en el segundo 24-41 al descanso y tras el paso por vestuarios un demoledor 8-21 dejó el partido sentenciado 32-62 con diez minutos finales para probar cosas y acabar con el conocido 39-68 final.
Muy buen encuentro de las nuestras, que parece que van lanzadas hacia los partidos importantes, en un muy buen estado de forma. Sólo lamentar las nuevas bajas de jugadoras que nos merman un poco los entrenos. Esperemos que no sea nada y pronto a entrenar con el grupo. Ahora al descanso de esta semana con una gran sonrisa y con ganas de seguir aprendiendo.
Gogor Unamuno!